Hola mi nombre Brenda tenía 16 años y el 36 años. Todo comenzó una tarde cuando a mi Facebook me llega una solicitud de amistad. Cuando abrí para ver quién era no lo conocía. Su foto se veía muy maduro y apuesto, con traje. Me trajo curiosidad y lo acepté.
Días después me escribió “Hola” y así hablamos por días y semanas. Hablamos de su trabajo y yo de mi colegio. Me decía lo linda que era, intercambiábamos teléfonos, él me llamaba cada noche para desearme la buenas noches. Me cantaba y me decía lo linda que era y que daría todo por conocerme.
Yo, al principio, me dio como extrañeza y un poco de miedo porque él era mayor que yo y que nunca antes me había juntado con alguien por este medio, hasta que un día salí más temprano de lo habitual de clases, entonces lo llamo y le digo que sí quiero juntarme con él. Él largó una sonrisa y me dijo que era el hombre más feliz del mundo. Me dijo que nos juntáramos en la playa, yo vestida con mi uniforme y un viento que me golpeaba la cara.
De repente lo veo. Mi estómago se puso duro, mis piernas creí que me iba a caer, él me miro y me dijo lo linda que era y que al fin podía estar conmigo. Cada segundo que pasaba con él me gustaba más.
Seguimos así por 3 meses. Luego él me cuenta que está casado y tiene dos hijos. Me sorprendí mucho y lloré delante de él, pero no me importa, estaba enamorada. Seguimos un romance ilegal. Me gustaba sentir que era un romance a escondidas, sentía mucha adrenalina cuando estaba con él. Era muy detallista, siempre me decía que estaba hermosa y que me quería.
Por lo cual perdí mi virginidad con él, conocí lo que era arriesgarse, conocí lo que era pasión, moteles. Todo era maravilloso estando con él. Duramos así durante 6 meses. Luego mi familia empezó a sospechar y quería averiguar de él. Nos empezamos a alejar cada vez más, porque no quería que nada le pasara. Luego le dije que esto ya no podía seguir así, que nos alejáramos, y luego sus llamadas eran más escasas y me llamaba solo para decirme que me amaba y que quería que lo intentáramos, pero yo me opuse. Pero no fue el tiempo que me resistí y nos volvimos a juntar y así duramos un año y algo, pero de a poco se empezó a alejar hasta que no supe nada mas de él.
Hoy en día tengo 20 años y nunca he estado con ningún hombre que me haga sentir lo mismo. Yo a él lo amo. Lo amo con locura.
Hoy en día lo que sé de él es que su esposa falleció en un accidente automovilístico y las veces que lo he visto por las calles me quedo pensando en lo hermoso que me hizo sentir cuando estaba con él. Si él me dijera que nos juntásemos, yo voy hasta la luna si él me lo pide.
Fue el error más lindo que me pudo haber pasado.