ME ENAMORÉ DE UN FUTBOLISTA

Todo empezó en el año 2010, estaba en primer año de mi carrera universitaria. Tenia apenas 19 años y muchas cosas por conocer en la vida, y asi fue.

Un dia, me encontraba con mi primo de mi misma edad viendo un partido de futbol. En realidad era él el que miraba, mientras yo hacia un trabajo que tenia que presentar al dia siguiente en la Universidad, era imposible concentrarme con sus gritos y quejas. A lo que yo le pregunté “¿Qué tanto reniegas? Es solo un partido de futbol”, le dije, A lo que el me respondió. “No, no es solo eso, son los mejores equipos de Europa, y podría decirse del mundo. Simplemente vos no sabes nada de esto”. Al escuchar su respuesta le dije: “A ver… Explícame”. Y ahí empezó a contarme la historia de ambos equipos.
A medida que en la TV enfocaban a los jugadores me iba dando características de cada uno de ellos, hasta que la pantalla se congeló en uno especial, y por ende yo quede prácticamente muda. Mi primo comenzó a describirlo a ese jugador, en esa época de 29 años, describía en que equipos había jugado, pero yo no lograba escucharlo ya que quede paralizada en su imagen: un hombre rubio, de ojos verdes, con un estado físico envidiable. Lo único que salió de mi boca en ese momento fue: “Qué hermoso que es” a lo que mi primo respondió “estas locá, no es tan fachero como otros”. Tal vez para el… pero para mi era muy buen mozo. Su nombre D (SOLO DIRE LA LETRA), 29 años en ese tiempo… llevaba un largo periodo como jugador profesional.
Seguimos hablando con mi primo hasta que se dio por finalizado el partido. Días después yo seguía interesada en aquel jugador, hasta que decidí googearlo, me aparecía toda su vida, donde había nacido, cuantos años tenia, su tiempo activo, hasta que di con su twitter. Recien hacía unos meses que el lo había creado, por lo tanto no tenia muchos seguidores, asi que decidi seguirlo.
Casi todos los días visitaba su twitt y le retwiteaba. Ya se hacia una especie de costumbre o tal vez una necesidad. Hasta que un buen dia me doy con una enorme sorpresa “D ** *** te esta siguiendo “ , mi reacción fue quedarme atónita. Puesto que podía mandarle un mensaje, pero no me hacia ilusiones que lo leyera, ya que una persona como el es muy ocupada y no tendría tiempo de leer mensajes de “fans”.
Pasó un par de días y justo dio la casualidad que estaba en conexión. No perdí tiempo y le escribí un pequeño y sencillo mensaje “Mi enorme admiración hacia tu talento, aquí también se te admira, y mucho. Saludos desde Argentina”  Y se lo envié. En ese momento tuve a apagar la computadora y seguir con mi estudio, puesto que no tenia esperanza tener una respuesta. Justamente ese tiempo tuve una semana llena de exámenes, por lo tanto no tuve tiempo de absolutamente nada. Cuándo las cosas mermaron, me di un descanso y entre a la web un rato a despejarme. Inmensa fue mi sorpresa al ver que tenia un mensaje del futbolista que decía “Que linda eres , no puedo creer que me conozcan hasta en esa parte del mundo, yo pensé que sólo me conocían en mi continente, es un gran halago tu parte, muchas gracias!!! Cuéntame algo de vos y tu país”
Mi reacción fue dar un brinco de la silla y agarrarme la cara , no lo podía creer, acaso ese futbolista extremadamente talentoso estaba haciéndome preguntas a mi? Si!!!!! Tarde menos de dos minutos en terminar de escribirle. Le dije mi nombre completo, mi edad, también que estudiaba para ser una profesora de Ingles, que por esa razón escribía bien en ese idioma (mis mensajes eran en ingles asi el los entienda). Le conté eso, un par de cositas mas y envié el mensaje.
Estuve 3 horas frente a la pantalla de la computadora para ver si conseguía otra respuesta de su parte, pero fue en vano. Ese dia apague la computadora y me fui a dormir, asi paso una semana hasta que volvi a tener un msj de D, en la que me decía “Parece que tenes una vida muy bonita, a mi me hubiese gustado ser profesor de cualquier cosa, pero lamentablemente ya tengo mi profesión de futbolista de la cual no me arrepiento, disculpa que haya tardado en responderte. Pasa que no entro muy seguido a esta red social, que te parece si te paso mi correo electrónico y de ahí conversamos tranquilos?” ¡Y lo hizo! Dejo su correo, no lo podía creer , me dejo su correo electrónico para poder conversar tranquilamente, no lo podía creer, era un manojo de emociones.
En ese preciso instante lo agregué, pero tenia que ser consciente de las 4 horas de diferencia que había de su país con el mio. Esa misma noche me quede hasta las 4 de la madrugada despierta, ya que el horaria de allá eran las 00 horas, y siempre a esa hora marcaba cuando me mandaba sus mensajes, espere hasta que lo encontré en hablarle, No di mas y le mande “Hola. Soy tu fan Argentina, me recuerdas? . Sentia un temor que su respuesta sea NO, pero para mi sorpresa su respuesta fue, “eyyyy ¡!¿como no acordarme? Claro que si me acuerdo, ¿cómo estas linda? Te dije que por acá platicaríamos mejor!” Dios mio… ese momento me sentía en otro mundo, estaba chateando con alguien que siempre crei que seria imposible simplemente que me siguiera por Twitter, pero no!! Estábamos chateando, y hablando de la vida de cada uno. El me contaba de la suya, como yo de la mia. Me contó que hacia 8 años que estaba casado, con 3 hijos , su debut en el futbol fue en 1998 , Tocamos temas profundos como la muerte de su padre, en ese tiempo hace un año, y de mi crianza con una madre soltera.
Los días pasaban y siempre estábamos en contacto, pasando un dia siempre chateábamos horas y horas, siempre había de que platicar, de su carrera como futbolista y de mi carrera como futura profesora. Cada día que chateábamos me sentía en las nubes, me imaginaba una vida con él, me imaginaba tantas cosas que para mi eran imposibles. De las 24 horas del dia 20 pensaba en D, a tal punto que me estaba asustado. Tenia miedo de perturbar mi carrera o tal vez de encerrarme en ese cuento de hadas que me imaginaba.
Un dia que estábamos chateando el se dio cuenta que tal vez no estaba en mi mejor humor, a lo que me pregunto: “¿Qué te pasa?” Yo le dije que nada.. pero el seguía insistiendo hasta que le dije: “Si hubieras tenido otra vida, te hubieras imaginado conmigo a tu lado?” Hubo una pausa de unos minutos, me decía a mi misma, “¿lo asuste? ¿No me hablara más? ¿Para qué dije eso?” Pensaba miles de cosas, me estaba desesperando, esos minutos de espera a una respuesta se estaban haciendo eternos, hasta que llego la respuesta… y fue un “SI, DEFINITIVAMENTE”.
En ese instante unas lagrimas brotaron de mis ojos me pregunte a mi misma, ¿por qué tiene que vivir tan lejos? ¿Por qué tiene que ser famoso? ¿Por qué tiene que ser casado y con hijos?… Eran preguntas que me las hacia a mi misma en ese preciso instante. Mi respuesta hacia el solo fue un “ah, bueno” , a los pocos segundos su pregunta fue “Y vos?”… Tantas cosas tenia para contestarle, tantas cosas estaban listas para salir del fondo de mi corazón, solo las noches eran testigos de que no dormía por pensar en él, en su cara, su sonrisa. Eran tantas cosas las que quería decirles que solo me salió escribirle “Si algún día llegara a conocerte seria mucho más feliz. No tuve respuestas, se desconecto y mi mundo se vino abajo.

En ese tiempo ya estábamos llegando a fines de 2011, ya había hecho mas de un año que nosotros veníamos chateando. Después de aquella conversación no volvimos a hablar mas del tema, simplemente de cosas cotidianas, el avance de mi carrera, su vida futbolística y personal. Había llegado al mundo su cuarto hijo junto a su esposa de casi una decada.
Llegó a mayo de 2012 y llego el dia de mi cumpleaños, D me saludo a través de chat y me pidió algo que verdaderamente me llamo muchísimo la atención: El código de mi país y mi numero de celular, sin pensarlo dos veces se lo mande rápidamente ya que estaba llegando tarde a la universidad, al salir de la misma ,camino a mi casa tipo 10 de la noche mi celular empieza a sonar, atendí sin importancia pensando de que era mi mamá. Me resultó ser una vos masculina: Hello?? I’ M D** (HOLA? SOY D***)”, mi alma se fue de mi cuerpo, mis piernas temblaban a tal punto que tuve que sentarme en una plaza que había ahí, era EL, aquel hombre que sin haberlo conocido personalmente me había quitado el sueño, el hambre, casi la vida… Llamaba para decirme feliz cumpleaños y para decirme que en el mes de julio venía a mi país a firmar unos papeles, y de paso seria la oportunidad justa para conocernos.
Intenté hablar lo mas tranquila posible, ya que mi garganta tenia un enorme nudo de tanta emoción, estuvimos hablando por celular cerca de 15 minutos, al terminar me puse a llorar como una estúpida, ¿estaba soñando? ¿Estaba loca o era en serio? Estaba a un mes y medio de conocer a aquella persona que tanto me enamoró.
En mi mente los días no pasaban mas, parecían meses y meses. Nuestro Punto de encuentro iba a ser El aeropuerto de Ezeiza de la ciudad de Buenos aires. Para llegar hasta ahí yo tenia 15 horas de viaje en micro, pero no me importo. Llego mi dia de viaje, armé mi pequeña valija ya que solo me iba por el fin de semana, le mentí a mi madre que viajaba a otra ciudad por un curso intensivo que ayudaría el avance de mi carrera, lo creyó.
Subi al micro y parti, desde ese momento ya tenia los nervios a flor de piel, sentía un fuerte dolor de estomago, estaba a menos de doce horas de conocer a D. En el camino intercambiábamos mensajes de texto, ya que el iba en el avión y llegaba una hora mas tarde que yo.
El micro llego a destino y llegue a la ciudad de Buenos Aires. Tomé un taxi y me dirigí hacia el aeropuerto, llegue ahí y me senté a esperar donde habíamos quedado, me sentía muy nerviosa pero a la vez ansiosa, mis manos temblaban, tenía un nudo en la garganta y en el estomago, creo nunca haber estado tan nerviosa en toda mi vida. Pasó un poco mas de una hora y no tenia ninguna novedad de D ,y encima mi celular había quedado sin señal, espere y espere , a medida que pasaba el tiempo mas nerviosa me ponía, hasta que de repente siento que alguien se sienta en el banquillo de al lado, giro para mirar y era el… era ÉL.
Con una sonrisa en su rostro y sus ojos brillantes me dijo “Hola”. En ese instante sentí algo inexplicable, una mezcla de euforia, emoción, felicidad , alegría, un sentimiento que se presenta una sola vez en la vida, y a mi me paso al verlo. Nos fundimos en un abrazo interminable, esos que parecen ser eternos y que uno no quiere que jamás acaben.
Fuimos a desayunar y de paso quedar en el hotel que el ya había encargado, un hotel hermoso y muy elegante, hablábamos y hablamos todo el tiempo, no había instante que haya silencio, no lo podía creer. Estábamos hablando personalmente, miraba su rostro, su sonrisa, el acariciaba mis mejillas ,apretaba mis manos… Me sentía tan feliz. Llego la noche, era hora de acostarse, obvio, había una cama matrimonial, hicimos el amor prácticamente toda la noche, recorrí cada centímetro de su hermoso cuerpo, como el recorrió el mío. Fue hermoso, muy pasional.
Asi paso volando el fin de semana, entre charlas, caricias y sexo. Llegó el momento que cada uno debía volver a su vida y a su lugar, el a su país y yo a mi ciudad. Lo acompañe al aeropuerto y minutos antes de subir al avión me confesó que era mentira que vino hacia mi país por un papeleo, vino exclusivamente a verme y le hubiese gustado que las cosas hubieran sido diferentes, diferente estilo de vida, su profesión, la enorme distancia de un país a otro (y sobre todo su esposa e hijos). Me atuve a decirle nada, sólo a besar sus labios por última vez y fundirnos en un fuerte abrazo. No quería soltarlo pero el debía volver a su vida. Subió al avión y se fue. Y yo quede ahí, con el corazón partido en dos, una angustia inexplicable y un montón de preguntas que no tenían respuestas: ¿Por qué tenia que vivir tan lejos? ¿Por que tuvimos que tener vidas tan diferentes?
Muchas preguntas que nadie me las iba a poder responder, No me importaba su fama, ni mucho menos su dinero, lo amaba a el, a su persona, su forma de ser. Dos años después y yo estoy aquí con mis sentimientos intactos, este año me recibo de profesora, no hay segundo que no lo tenga presente en mí, no hay noche que no lo sueñe, y eso se debe a mi gran anhelo de volverlo a ver algún dia, de volver a sentir su piel, de acariciarlo, de besarlo.
No creo que alguna otra vez llegue a sentir esta clase de amor. Actualmente estoy en una relación hace ya casi un años con un chico que se recibió de abogado en mi misma universidad. Con D por ahí chateamos, esta a full con el fútbol, la ultima vez lo vi por TV en un partido del Mundial 2014, ya que jugó para su selección natal y, de esas casualidades de la vida, mi país fue el que derroto al suyo.